Inolvidable noche para la Historia del Arte Flamenco.
Antes de pasar a contaros lo que allí pudimos vivir algo más de 400 privilegiados, quisiera poner en antecedente tres cosas fundamentales para entender lo que sucedió la noche del 19 de agosto de 2017.
Primero, el homenajeado es Juan Villar (Cádiz 1947-) y toda la saga que Juan deja detrás de sus pasos, casi ná, gran cantaor gaditano que ha llevado el flamenco a medio mundo y que a nadie deja indiferente, un artista de los pies a la cabeza que encierra en su cante los vientos gaditanos. Y una saga… Incombustible… Hay Villar pa´ rato.
Segundo, el enclave, el Castillo de Santa Catalina, siglos XVI y XVII, un lugar privilegiado, histórico, declarado Bien de Interés Cultural en 1985, con la Caleta a sus pies, rodeado del mar al ser uno de los baluartes defensivos de la ciudad de Cádiz, con un patio de armas dedicado a conciertos y diversas actividades culturales, sólo con entrar percibes unas sensaciones increíbles.
Tercero, el público, los que venimos de otros lugares de la geografía española, vemos que aquí el flamenco se vive de otra forma, está integrado en el día a día de las gentes, había momentos por bulerías donde más de la mitad del aforo daba compás sin una palma mal, los olés a tiempo, paladeando el público cada segundo del espectáculo ¡Viva Cai!.
Narrar casi 4 horas de espectáculo y detallar todo es imposible y no pretendo hacer esta vivencia algo ilegible, sólo intentaré acercaros lo más posible lo que pasó en esa noche histórica. Pido disculpas por anticipado si olvido mencionar a algún artista.
El espectáculo contó con un elenco de Artistas en mayúsculas, en principio imposible de reunir en una misma noche, comenzó con un minuto de silencio a las 22.38 horas en homenaje a las víctimas de los recientes atentados de Barcelona y Cambrills, y se dividió en 8 bloques:
Bloque 1 :
Al Cante: Rancapino, Rancapino Chico, Esperanza Fernández, El Pulga e Israel Fernández con las guitarras de Antonio Higuero y Carlos de Jacoba.
Rancapino Chico hace mucho que dejó de ser promesa, un hombre que transmite y da unos pellizcos al alma que te mantiene sin respiración, cantó por bulerías pa´rabiar. El Pulga nos encantó con su sabiduría y su eco tan flamenco, también por bulerías; lo mismo hizo Israel Fernández dejando con la boca abierta a los que no le conocían, con esos matices que tiene, con ese cante desde los rincones del alma, simplemente ole! Llegó un momento de locura justo después, cuando Rancapino padre saltó a escena y se hizo 3 fandangos, 2 dedicados a las mujeres presentes y el tercero a su amigo Juan Villar, apoteosis y locura en el público, la esencia, lo puro con naturalidad, el cariño del público a un artista consagrado. Cerró este bloque magistral Esperanza Fernández por bulerías con su sonido tan peculiar, tan flamenco, cantándose y bailándose con el cariño del público y tuvimos que decirle olé muchas veces igual que a sus compañeros. Antonio Higuero en plena madurez de toque haciéndonos gozar con esa forma tan flamenca de «caminar» con su guitarra y Carlos de Jacoba, aunque no se escuchaba apenas el micro, con ese oficio que le hace también un enorme guitarrista.
Bloque 2 :
Cante: Ana Polanco y Paco Reyes con las guitarras de Carlos de Jacoba y Ricky Rivera y el Baile de Raquel González.
Paco Reyes nos interpretó unos tangos para rabiar con su voz tan flamenca y su soniquetazo, qué arte más grande, repasando varios estilos por este palo. Ana Polanco le cantó por soleá por bulerías con mucha sabiduría, arte y corazón a Raquel González, una joven bailaora que parecía mucho más veterana en el escenario y que fue en todo momento de menos a más. Acabaron los 2 cantaores por bulerías en una explosión magistral de cante, toque y baile y el público aplaudiendo enérgicamente lo que los 5 artistas nos habían regalado.
Bloque 3:
Al cante; David Palomar, Antonio Reyes, Ángel Pastor y Macarena de Jerez ,al toque Diego Amaya y Nono Reyes y el baile de Patricia Valdés, casi ná.
Soniquetazo para empezar este bloque con las guitarras de Diego Amaya y Nono Reyes y más de la mitad del público de nuevo. Antonio Reyes magistral cantando por bulerías y Patricia Valdés bailándole a su marido descalza, sin taconear, sólo bailándole, eso es para vivirlo, para rematar le hizo Antonio una zambra y en un momento sentí que estaba viendo a Caracol y Lola Flores, vellos como escarpias. Siguió por bulerías de Cádiz David Palomar y el público entregado con él desde el primer segundo, influenciado en su cante por Chano Lobato, Mariana Cornejo y tantos otros pero muy personal, del barrio de la Viña y gaditano por los 4 costados, artista grande, se lo dedicó a Juan Villar y … Montó el taco ¡Qué Arte David! Llega el turno de Macarena de Jerez que le dedicó también su arte a Juan Villar, otra vez soniquetazo de Diego, Nono y el público por bulerías y Macarena cantando y bailando, gustándose en el escenario, otra artista de bandera, ¡ vaya noche! ¡Qué poderío! Cerró este bloque Ángel Pastor cantando por bulerías con un sonido mu flamenco, aplausos para él en este bloque y para despedir a los artistas .
Bloque 4:
Al cante Antonio y Juan Villar (hijo), hay herencia, la saga continúa, tan personales ambos y tan flamencos, y con tanto oficio, también David «el Galli»y Tamara , soberbios, ninguno de los 4 nos dejaron indiferentes a nadie, dieron su alma en forma de pellizcos. Las guitarras corrieron a cargo de Román Vicenti y Ricky Rivera con un toque y acompañamiento al cante y el baile magistral, de élite, entre todos hicieron una alegrías de Cádiz para quitarse el sombrero, una auténtica pasada por soleá y cierre por bulerías para reventar. Cinco bailaores/as salieron a escena, a cada uno le pondré uno o dos adjetivos para resumir lo que nos hicieron sentir, al menos como yo lo viví, aunque fueron todos a un altísimo nivel. María Moreno, bailó muy flamenca y muy gitana, mu puro, Pilar Ogalla con mucho temple y conocimiento, transmitiendo, estirando el cante, Andrés Peña con velocidad y sutileza de 0 a 100 en un segundo y muy despacio cuando había que hacerlo, Juan Ogalla, qué clase y templanza, las buenas hechuras, bailando con mucho gusto, cerró el Junco en un estado de permanente evolución y flamencura que pude percibir desde la última vez que le vi a ésta. El público disfrutando y aplaudiendo intensamente la media hora que estos Artistas, también en mayúsculas, nos regalaron.
Bloque 5:
Subieron a escena el grupo Sinelando con Francisco Macías y Chele al cante y el toque de Ramón Vicenti y el Pelu, que nos ofrecieron un cante y un toque por bulerías muy flamenco también con mucho soniquete, apareció en escena Francisquito hijo de Francisco con unos 3 años a darse una patá por bulerías, el público entregado con el pequeño y el cuadro completo, oleee los 5.
Bloque 6:
Llega otro momento mágico más de los muchos que hubo esta noche, al cante El Galli y Antonio Villar empezando por soleá con el toque magistral de Raul y Román Vicenti, templando el cante muy despacio para que «Farruquito» bailara las letras muy despacio como hacía Farruco, poniéndonos el alma en un puño, el público en silencio sobrecogido con el toque, el cante y el baile… Para salir locos de allí. Pasaron a bulerías y Juan nos rompió el alma con su baile, dejando paso al Carpeta que se recogía de una forma muy flamenca con un soniquete de locura, Carpeta dio paso a Polito que bailó con un compás que nos hizo también hervir la sangre. Polito llamó a Pepe Torres inigualable bailaor y guitarrista de Morón que puso el patio de armas del Castillo de Santa Catalina con los puños encogidos, Pepe llamó a Farruquito y se dieron una patada por bulerías los 2 frente a frente. Hicieron gritar a la gente, los 2 llamaron a El Carpeta y Polito y se fueron los 4 Bailaores del escenario bailando abrazados, apoteosis, momento de locura y algunas lágrimas de la emoción, ovación interminable y la gente diciendo ¡qué noche, qué locura!.
Bloque 7:
Llegó el turno de Triana y Utrera, al cante Manuel de Angustia que hizo unas bulerías «Dime Cuanto» con un arte fuera de lo normal, hablándolas casi, bestial Manuel, aquí tienes otro seguidor pa´siempre. Siguió la estela del éxito la Trianera Herminia Borja, madre de la cantaora la Tana, cantando como ella sabe a pellizcos y bailándose, muero con ella y el público también entregado en este bloque. Carmen de la Jara haciendo letras muy populares por bulerías con el público disfrutando, nos ofreció un gran regalo y se lo dedicó a Juan Villar «Patriarca del cante Gaditano» dijo. Era el turno de Mari Peña cantándole por bulerías de Utrera, tirando para atrás y pa´rabiar a Carmen Ledesma que bailó muy gitana, muy despacio, exprimiendo cada movimiento, con las tablas que dan los años de una carrera tan brillante. Todo este bloque estuvo acompañado increíblemente bien por un pedazo guitarrista que es el Pelu, maestro.
Bloque 8:
La saga de los Villar al completo, imposible enumerarlos a todos, varias generaciones de la familia Villar por Bulerías, en el escenario, repleto con la emoción en el aire de una noche gloriosa, digna de mención para la Historia del flamenco. Subió la bailaora Lidia Cabello con todo su arte del mundo a bailar por bulerías y en ese punto ya el público no paraba de dar compás y jalear a todos los artistas que tomaban parte, en el último minuto subió Juan Villar y se dio una pataíta con hijos, sobrinos, nietos etc y el público otra vez en pie ovacionando al Patriarca y a toda su Saga. Únicamente echamos de menos el Cante del Maestro que quizá por cuestión de tiempo no pudo ser.
A lo largo del evento subieron a tocar la percusión al menos que yo pudiera ver 2 fenómenos que dieron soporte al cante, al toque y al baile magistralmente y con mucho peso a pesar de su juventud, Edu Gómez y Ramón Torre, perdón de nuevo si he olvidado mencionar a alguien.
Casi 4 horas de locura, de Historia, de Arte, una Gala preparada con mucho cariño, muy difícil de organizar y que salió muy bien y nos dejó el alma llena, imposible borrar de la mente.
La gran organización, Lidia Cabello y Luisa Villar, mil gracias a las 2 y a todas las personas no nombradas que hicieron posible que esta noche pasara a la historia con un cartel irrepetible, y gracias por abrirnos las puertas a Vivepasionflamenca y tratarnos tan bien.
Gracias a Juan Villar y su familia por su legado y aportación al flamenco, os admiro de corazón.
«Abuelos ,padres y tíos, de los buenos manantiales nacen los buenos ríos»
Fotos Archivo VPF de Sonsoles Benítez, Carmen Fernández – Enríquez y Sara GPunto Foto.
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