Anoche asistí a la inauguración del III Festival Flamenco Madrid en el Teatro Fernán Gómez. El teatro parecía tener vida propia y estar encantado con el aire flamenco entre sus paredes. Aquellos que fuisteis percibiríais ese ambiente, por la cantidad de bailaores y bailaoras y grandes artistas que acudieron a la cita. Además en el hall de la sala Guirau hay una bonita exposición para homenajear a la gran coreógrafa Mariemma, con hermosos vestidos y fotografías de su extensa carrera, al cumplirse los 100 años de su nacimiento.

Como llegué pronto, me dirigí a la cafetería Colón sita en el teatro. Estaba llena de gente que iba a ver “LABERÍNTICA” de Marcos Flores. Como digo, vi muchos compañeros que habían acudido al estreno de este buen festival madrileño. Y acercándose la hora de comienzo salí hacia la Sala, para ver bailar en el hall, entre el público a Sara Cano, que presentará “A Palo Seco” el 1 de Junio, y que quiso regalarnos una pieza de baile, una composición valiente, con grandes dotes dancísticas, expresando corporalmente la esencia del festival y que sirvió de anacrusa del espéctaculo de baile que venía justo a continuación.

Y ya dentro de la sala Guirau y todos ubicados en nuestras butacas, hasta la misma Manuela Carmena, que también asistió al teatro, comienza LABERÍNTICA. Cinco bailarines entre ellos Marcos Flores, director y productor, salen al escenario entre un ambiente oscuro y sinuoso, creado el humo y las luces, bajo la dirección de Olga García, tengo que decir que logra meternos en el laberinto de sentimientos que parece contarnos la obra. Llegamos a sentir, la frustración, el miedo, el dolor, la incertidumbre y también el coraje del protagonista. Hay un gran trabajo coreógrafo e interpretativo en la obra. Me pareció original y valiente. Con mucha simbología, muy teatral. Por nombrar una, hay una escena casi al final, fue de las que más me emocionó, en la que Marcos, se da cuenta al borde del precipicio, de lo maravilloso de su ser, de su esencia. Muy bien interpretado, me pareció precioso como hace la transición a la reafirmación, y salen “las mujeres” como bálsamo y abrigo maternal. Chapueau!

Toda la historia, que como digo me ha encantado, se entiende por la buena interpretación de todo el elenco, los bailarines, que estuvieron sensacionales y coordinados a la perfección. Los músicos, José Almarcha a la guitarra y Quique Terrón a la percusión y las tres cantaoras, Inma Rivero, Mercedes Cortés y Loreto de Diego, que tuvieron mucho protagonismo durante toda la obra. Tengo que resaltar el papel de la guitarrista Antonia Jiménez, compositora junto a Almarcha y otros guitarristas de la música de Laberíntica.

La sala Guirau casi se llenó completamente, y el público disfrutó y aplaudió cada pieza y escena, creo firmemente que quedamos atrapados en el hermoso laberinto del buen baile, y no queremos salir de él para disfrutar en el Fernán Gómez hasta el 11 de junio, día en que se clausura Flamenco Madrid.

Fotos de Carmen Fernández – Enríquez.