Sevilla, 15 de Enero de 2016, Teatro La Maestranza. Era cita ineludible; cuando hace unos meses José María Gallardo del Rey nos comentó que iba a poner en marcha este espectáculo, no dudamos, teníamos que cubrirlo. Y como era de imaginar, no solo no decepcionó si no que nos emocionó aún más de lo que creíamos.

Comenzaba el concierto con una parte clásica, sobre el escenario la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla, dirigida por John Axelrod y José María Gallardo del Rey a la guitarra, acompañado por la percusión del cajón flamenco de Roberto Vozmediano, así interpretaban el «Concierto de Sevilla», Noche de Bulería, Madrugá y Noche de Feria.

Tras ello, y debido a un problema logístico, el guitarrista ofreció al público la «Danza Española nº 5» de Granados.

Llegó el descanso, y a la vuelta, comienza la parte más flamenca del espectáculo. Sobre las tablas siguen la Real Orquesta y José María Gallardo, pero se unen un cuadro flamenco formado por dos guitarristas Pablo San Nicasio y Alberto Espejo, los cantaores Matías de Paula, Pedro Obregón y Marcos Martín, la flauta de Ezequiel Cortabarría y de nuevo la percusión. Además la invitada especial Esperanza Fernández, que vuelve a hacer una vez más una interpretación magistral de «El Amor Brujo».

Empiezan las tonás, con voz masculina, que da paso a la primera interpretación de Esperanza, y la entrada en escena del cuerpo de baile, integrado por Elena Moreno, Borja Cortés, Paula Salazar, José E. Martínez y Marta Mancera, dirigidos y coreografiados por Rubén Olmo.

El espectáculo transcurre los 40 minutos de esta manera, con momentos de baile y momentos de cante, acompañados siempre por el resto del personal ya citado. Hay bulerías, seguirilla, con las voces de los cantaores metidas a tiempos distintos, tangos, «El Romance del Pescador», recitado por Esperanza Fernández con el mismo gusto que canta, lo interpreta muy flamenca, jugando con el mantón, y vuelve a sentarse.

El cuerpo de baile sale haciendo careos al son de «La Danza del Fuego».

El espectáculo, de inigualable belleza en su conjunto, lleno de armonía y de emoción, lleno de seducción, la seducción más elegante posible. El empaste de la Real Orquesta con el cuerpo de baile, la guitarra del maestro Gallardo del Rey y el cuadro flamenco, con la voz protagonista de Esperanza, no puede estar realizado con mayor calidad.

Ya el final con la cantaora dando las «Campanas del Amanecer», el juego de los colores, no solo los musicales sino los del vestuario y la iluminación, perfectamente elegidos.

Poder disfrutar de la gitana por excelencia, bordando un espectáculo sito en el primer puesto del podium de la cultura, de la calidad artística y de la belleza, lo hace aún más emocionante.

El broche final lo da de nuevo el baile, que ha tenido una coreografía e interpretación exquisita, y terminan todos en el escenario, a compás de castañuelas y tocando, cantando y bailando a Andalucía.

Sencillamente sublime.

Foto y vídeo de Sonsoles Benítez de Soto.