«Siempre por los rincones te encuentro llorando», con esta letra empezó Alonso por Seguiriyas, así nos gustaría encontrárnoslo siempre a él, por los rincones, pero cantando, y si es acompañado del toque de Higuero, mejor! Vaya dúo forman!No se puede estar más «compenetrao»!

En la noche del viernes del Ciclo «Rivas con Duende» se formó una buena. Qué gustazo poder asistir a recitales como éste. Llenos de intimidad, de amigos, de gente con duende, como el ciclo.

Alonso comenzó cantando por alegrías, al compás Juan Diego Valencia y Manuel Cantaorote que salieron del escenario para que Rancapino Chico y Antonio Higuero siguieran por soleá, en las que el Toque esta vez, hay que escribirlo en mayúsculas. Antonio acompaña a los mejores, porque él es ya uno de los mejores y estoy segura que su nombre va a estar entre las figuras grandes de la guitarra.

Hubo malagueñas; la vuelta de las palmas fue por tangos, pero no cualquiera, no. Unos tangos que el maestro Paco Cepero compuso para que Alonso le cante a sus padres.

La dedicatoria de la noche fue para Elvira López Hidalgo, «tía Elvira», como la llamó el cantaor, que ha coordinado este Ciclo junto con la Casa de Andalucía de Rivas y el Ayuntamiento. Y fue por fandangos, en los que una vez más, Alonso mostró su «metal», como dice su Antonio.

Era ya la despedida pero no pudo ser, ya que el Centro Cultural García Lorca acabó en pie pidiendo otra y tuvimos fin de fiesta por bulerías, entre ellas «Viejo Mundo».

Con muchísimas ganas de volver a ver a estos artistas sobre el escenario, os dejamos un vídeo de los tangos de Paco Cepero. Vive Pasión Flamenca!