Se ha marchado en silencio, sin hacer ruido, discreto, como siempre fue, él y su forma de tocar. Enrique Escudero, el «Tío Enrique», acompañó a los más grandes, cantaores y bailaores, Rancapino, Fernada y Bernarda, el Güito, Gades, Lola Flores, Bambino, Manzanita…

Con su guitarra recorrió los escenarios de multitud de países. Los que le conocieron destacan su sentido del humor. Era guitarrista flamenco de los clásicos, los de siempre, los de hincharse a tocar después de las actuaciones con sus colegas en cualquier bar de al lado.

Tras una trayectoria impecable con la que sacó adelante a 4 hijos, tuvo que dejar de lado la guitarra debido a un ictus. Tuvo eso sí, su merecido homenaje en vida. Su hijo Joselín, percusionista  y compositor, se lo organizó en Madrid y por la puerta grande, rodeado de sus amigos, de los artistas a los que tantas veces había acompañado y con los que tantas vivencias tenía. Él estaba ilusionadísimo con ese día, quería estar en todas partes, vivir su homenaje desde el camerino y desde el patio de butacas.  Y así lo hizo.

Rancapino nos hablaba este medio día así de él: » Era una bellísima persona, encantador, era muy bueno, te «jartabas» de reír con él….Y en su género era único, un gran «tocaor», tenía mucho nombre dentro y fuera de España. A mí me acompañó varias veces en Madrid y me decía siempre: Rancapino, qué bien cantas!Pero pareces japonés!»

También Pepe Habichuela nos ha contado que » era un gitano muy bueno, con mucho humor. Fue alumno de mi hermano Juan y fue un guitarrista muy flamenco, con mucha gitanería. Una anécdota que puedo contarte es una vez que íbamos andando por la Gran Vía, todos con trajes nuevos y estaba lloviendo, y él, que era un poco cojo, pisó un charco y nos bañó a todos! Era muy gracioso y muy buen «aficionao». He sentido mucho su pérdida».

Este guitarrista alicantino se ha marchado, ayer por la mañana, a otra parte desde la que seguro volverá a tocar su sonanta y a formarla con Fernanda, Bernarda, Gades, Lola y Manzanita.

Os dejamos un vídeo en el que acompaña a Manuela Vargas junto con los Habichuela.

Foto cedida por Celia de Coca.